Paraísos fiscales en la Unión Europea

Herman van Rompuy, Presidente del Consejo Europeo - INEAF

Un paraíso fiscal es un territorio de baja o nula tributación que garantiza la opacidad de las transacciones.

El fin último del fraude fiscal es la evasión de impuestos, es decir, tratar de eludir el pago de los mismos. Los medios de comunicación han puesto de manifiesto una serie de datos relacionados con el traspaso de ingresos a paraísos fiscales, provocando reacciones políticas.Herman van Rompuy, Presidente del Consejo Europeo - INEAF

Países como Luxemburgo, Austria o Liechtenstein están dispuestos a compartir los datos bancarios de los extranjeros para regularizar la situación fiscal; por su parte, Suiza se opone al intercambio de información.

Las cinco potencias económicas de la Unión Europea más influyentes (Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y España) tratan de reforzar el mecanismo de intercambio de datos, mediante la Ley de Cumplimiento Fiscal de Cuentas Extranjeras de EE.UU. (FATCA), a esta medida se han unido otros países europeos como Polonia, Bélgica, Holanda y Rumanía.

A través de la FATCA se trata de conseguir que las entidades financieras pongan a disposición de las autoridades toda la información de contribuyentes estadounidenses que posean cuentas en el extranjero, con el fin de eludir la evasión de impuestos transfronteriza.

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, afirma que cada año “se pierde un billón de euros por la evasión fiscal en la UE”, lo que, para hacernos una idea, equivaldría al PIB de España.

“Cada año se pierde un billón de euros en la UE por la evasión fiscal”

Respecto al pago del IRPF en España, cuando una persona física de nacionalidad española acredite su nueva residencia fiscal en un país o territorio considerado como paraíso fiscal, no perderá su condición de contribuyente por el IRPF español durante el período impositivo en que se efectúe el cambio de residencia, ni tampoco en los cuatro años siguientes.

Esto quiere decir que, si una persona residente en España se traslada a vivir a un país considerado como paraíso fiscal, tiene que justificar que vive allí 183 días al año tributando, de esta manera, por el IRPF español ese año y los 4 años siguientes.

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