Margen bruto

El margen bruto se erige como uno de los indicadores más importantes en la toma de decisiones empresariales y financieras. ¿Por qué es tan importante? Porque, a grandes rasgos, aporta una visión profunda de la rentabilidad y eficiencia de la producción una compañía. Aun así, hay muchos aspectos que explicar sobre el margen bruto. Quédate en INESEM y aprende todo lo necesario sobre este concepto. 

Entendiendo qué es el margen bruto 

El margen bruto se puede definir como un indicador financiero que nos muestra la diferencia entre los ingresos totales generados por las ventas y los costes que ha supuesto la producción de los bienes o productos. ¿Cómo se puede traducir esto a un lenguaje común? Básicamente, es la cantidad de dinero que le queda a una empresa después de restar todo lo que le ha supuesto producir y vender un producto. 

Otros profesionales lo miden por cada euro. Es decir, de cada euro de ingresos, cuánto ha quedado al quitarle el coste dinero de producción. Si por cada euro hay 33 céntimos de coste, pues el margen bruto sería la diferencia. El margen bruto refleja si la fase de producción de una empresa es realmente eficiente o no. 

Por ejemplo, si tenemos un margen bruto elevado, significará que estamos generando una cantidad considerable de ingresos brutos, pero si es bajo, este indicador puede mostrar una situación alarmante. 

¿Cuál es la función del margen bruto? 

¿Para qué sirve el margen bruto? Pues bien, este indicador cuenta con distintos objetivos que ayuden a los empresarios a tomar las decisiones pertinentes. Se trata de tener control sobre el estado de salud del proceso de producción. Ante cualquier alteración, permite tomar decisiones antes de que la situación sea insostenible. Vamos a ver sus funciones: 

  • Evaluar la rentabilidad de la empresa: como venimos diciendo, te permite medir cómo de rentable es un producto o servicio. Y es que muestra la proporción de cada unidad monetaria de ventas que se convierte en ganancia bruta. 

  • Comparar con otros competidores: obviamente, es un indicador que se usa para comparar la eficiencia en el proceso de producción entre las empresas que se dedican a lo mismo. 

  • Tomar decisiones estratégicas: de igual manera, el margen bruto permite que te adelantes a cualquier movimiento del mercado y te adaptes con rapidez. Algunas acciones que se suelen hacer es cambiar la política de precios o aplicar descuentos. 

¿Cuál es la fórmula del margen bruto? 

Seguramente que te estés preguntando cómo se calcula el margen bruto. Y bien, debes saber que existe una fórmula sencilla para extraer este dato: 

Margen Bruto = (Ingresos Totales − Costo de Bienes Vendidos (COGS) / Ingresos totales) X 100 

Para calcular el margen bruto, debes tener en cuenta una serie de pasos. Por ejemplo, debes sumar absolutamente todos los ingresos de tu empresa por la venta de productos o servicios. Después, tienes que sumar todos los costes directos de dicha producción y venta. Por último, y con los datos, debes restar el coste directo o COGS a los ingresos totales, dividirlo lo que te resulte por los ingresos totales y multiplicarlo por 100. 

¿Y cómo se interpreta el margen bruto? 

La siguiente pregunta que te invadirá es si el dato al que has llegado es alarmante o no. Pues bien, en INESEM te vamos a presentar una escala que puedes tener en cuenta. De esta manera, sabrás si cuentas con un increíble margen bruto o, al contrario, tienes que encender las alarmas en tus empresas. 

  • Margen bruto alto, de más de un 50 %: este margen bruto se puede traducir en qué la empresa retiene 50 céntimos de cada euro. La mitad o más de lo que gana, lo que implica una eficiencia productiva elevada. 

  • Margen bruto moderado: entre el 30 y 50 %: este margen bruto no llega a ser alarmante, ya que es muy típico de empresas que cuentan con una alta competencia o costes controlados. En cierto modo, este rango nos muestra una gestión eficiente de los costes. 

  • Margen bruto bajo, entre 0 y 30 %: Imagina que fuese del 5 %. Esto se traduciría en 5 céntimos de cada euro de ventas. Prácticamente no hay ganancia después del proceso productivo y de ventas. Aquí habrá que tomar decisiones como la de subir los precios o abaratar los costes de producción. 

¿Qué diferencia hay entre margen bruto y margen neto? 

La diferencia entre el margen bruto y el margen neto radica en los costes que se calculan. En el margen bruto, calculamos únicamente el coste directo del proceso de producción y venta, mientras que en el margen neto se calculan todos los datos, incluyendo los costes operativos, intereses, impuestos y otros gatos. 

Por ello, decimos que el margen bruto es el ideal para ver la eficiencia de la producción, ya que el margen neto sirve para detectar la rentabilidad completa de la empresa. 

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