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Brainwriting
El brainwriting es una técnica muy simple y eficaz para generar ideas innovadoras, resolver un problema, desarrollar un proyecto o aportar mejoras a una situación.
Para realizar la técnica de brainwriting es importante que se haya explicado y discutido previamente el asunto a tratar. Luego, la persona que comienza la cadena escribe en una hoja de papel las tres primeras ideas que se le ocurran en relación con el asunto en cuestión y pasa el papel al siguiente compañero que deberá leer lo que hay escrito y añadir otra idea, mejora o modificación de las anteriores y pasar, a su vez, el papel al siguiente participante. La cadena sigue hasta que el papel vuelve a la primera persona.
La técnica se basa en la idea de inteligencia colectiva; las ideas escritas actúan a modo de activadores de la creatividad y facilitan la generación de nuevas ideas. Además, resulta muy práctica para usar en grupos cuyos integrantes se conocen poco, pues el hecho de escribir las ideas en vez de exponerlas en público es más impersonal.
El brainwriting procede del brainstorming
Esta técnica, al igual que el brainwriting, busca que todo el grupo aporte una serie de ideas o soluciones para resolver un problema expuesto previamente.
La principal diferencia con el brainwriting es que en el brainstorming la exposición de ideas es oral y presenta una serie de reglas:
- Durante la sesión de brainstorming debe haber una persona encargada de controlar la sesión. Esa persona se encargará de exponer el problema y los objetivos de la sesión lo más claro posible.
- Las ideas deben surgir en un ambiente relajado, fomentando una comunicación informal y a ser posible, que la reunión sea divertida para fomentar la participación.
- No existen límites para exponer soluciones al problema planteado.
- Las ideas se expresarán independientemente de su calidad. No se valorará ninguna idea hasta que no se haya dicho la última frase.
- No deben criticarse las ideas expuestas, ya que podría provocar un efecto negativo en el resto de las participantes.
- Es aconsejable que se asocien libremente las ideas propias que las ya expuestas. Cuantas más intervenciones, más posibilidades de encontrar posibilidades válidas.
- No existe un orden de turno establecido.
Una vez que se han explicado las reglas, se plantea el problema a solucionar. A continuación, el grupo irá exponiendo en voz alta sus ideas y se irá anotando en una pizarra. De esta forma se produce una lluvia de ideas que van a generar otras nuevas o mejoras de otras ideas ya expuestas.
El brainstorming es una técnica de generación de ideas muy utilizada en el mundo empresarial, pero en ciertos casos puede presentar problemas.
Cuando los que intervienen en la reunión no se conocen o tienen poca confianza, es preferible utilizar la técnica del brainwriting, ya que el anonimato les dará más seguridad a la hora de exponer ciertas ideas que no comentarían si lo tuviesen que decir delante de todos.