Tarde o temprano iba a ocurrir. Baja tributación, secretismo en el intercambio de información y testaferros han generado la explosión de información que salpica de lleno a Jefes de Estado y de Gobierno, políticos, empresarios, deportistas, actores y otros tantos, todos ellos titulares o vinculados a sociedades opacas, las llamadas sociedades offshore.
El despacho de abogados de Panamá, Mossack Fonseca, entre sus servicios, ha gestionado más de 240.000 constituciones de empresas en el mismo país o en otros territorios opacos. Pero al parecer, según defienden las autoridades panameñas, todo dentro de la legalidad.
Lo que sí es cierto es que Panamá, para nuestro país, dejó de ser paraíso fiscal tras la firma del correspondiente convenio de doble imposición que incluía el intercambio de información. Otra cosa es el tipo de información que se selecciona para posteriormente intercambiar.
Sin embargo, la Comisión Europea, sigue considerando a Panamá uno de los 30 paraísos fiscales. Además, junto con EEUU, Panamá no se ha sumado al acuerdo multilateral firmado en el seno de la OCDE, que permite intercambio de información fiscal entre 132 países.
Algunos de estos constaban como directores, presidentes o administradores de empresas opacas en curso o ya disueltas. Aun así, como es lógico, aseguran que todos sus ingresos se han declarado y está al corriente de sus obligaciones tributarias.
Estos son algunos los nombres que se incluyen dentro de los 11,5 millones de documentos que han sido filtrados, información que también revela cómo el despacho Mossack ha ayudado a sus clientes a blanquear dinero procedente de distintas actividades. Afecta a unas 200.000 empresas, lo que supone más de la mitad de las distintas firmas que gestiona el despacho.
Todo este entramado nos lleva a cuestionarnos si efectivamente se llevan a cabo los intercambios de información fiscal a los que los distintos territorios se comprometen. ¿Cada país selecciona, según les conviene, la información que intercambian?
Aun así, como ya sabemos, España sigue avanzando en la evasión fiscal. Un suma y sigue de políticos, famosos, deportistas y demás que no cumplen con sus obligaciones fiscales. Y es que, esto de tener y no pagar, está a la orden día.