Como todos sabemos y ya hemos comentado en INEAF (véase: “La cara negativa de la Reforma Fiscal: supresión de exenciones y reducción de deducciones”), el anteproyecto de ley de la nueva reforma fiscal rebaja a 2.000 euros por año trabajado el mínimo exento de tributación de las indemnizaciones por despido que hasta ahora, se situaba en 33 días por año trabajado.
Este mínimo, equivaldría
En este sentido, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro indicaba que dicho límite era una simple propuesta orientada hacia el diálogo.
Tras una respuesta polémica por parte de los ciudadanos y los medios, el ministro ha adelantado que subirá dicho mínimo.
La justificación de dicha medida se argumenta en evitar abusos producidos por despidos pactados con indemnizaciones millonarias que en parte estaban exentas y que fomentaban la desigualdad.
Seguiremos atentos y expectantes a la aprobación definitiva de la reforma fiscal, y veremos a que cifra aumentará el mínimo exento, y que consecuencias tendrá.