El pasado 1 de noviembre entraba en vigor la normativa que regula el nuevo Consejo Fiscal Europeo. Se trata de un órgano de carácter consultivo para la Comisión Europea en materia de supervisión fiscal multilateral, que a su vez evaluará la aplicación del marco fiscal de la Unión Europea velando por la coherencia de las decisiones tomadas y la ejecución presupuestaria, los casos de incumplimiento graves de las normas y la adecuación de la política fiscal a nivel nacional y de la zona euro.
Entre otras funciones también podrá asesorar sobre las políticas fiscales nacionales para así mantener su coherencia con las normas del Pacto de estabilidad y crecimiento.
Si la comisión detecta riesgos que pongan en peligro el correcto funcionamiento de la unión económica y monetaria, deberá asesorar aportando las consideraciones específicas dentro de las distintas opciones políticas disponibles en el Pacto.
La composición del Consejo Fiscal Europeo será de un presidente, encargado de supervisar la ejecución de las tareas del propio Consejo y de garantizar el correcto funcionamiento, que además convocará y presidirá las reuniones, y 4 miembros.
El presidente y uno de los cuatro miembros serán nombrados por la Comisión a propuesta del presidente, previa consulta al vicepresidente responsable del Euro y el Diálogo Social y al comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Fiscalidad y Aduanas.
Estos miembros deberán ser expertos
De entre las obligaciones del consejo, destacar que deberá publicarse un informe anual de sus actividades, incluyendo un resumen de las recomendaciones y evaluaciones presentadas por la Comisión.