¿Es buen momento para bajar impuestos?

bajada de impuestos

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23/09/2014

Según declaraciones de Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda, España puede permitirse bajar los impuestos a pesar de varias recomendaciones por parte de la Unión Europea de no hacerlo, y así lo ha confirmado en la famosa y esperada reforma fiscal.

Los argumentos que utiliza el ministro, son los de dar un respiro a los trabajadores, empresas y familias, que han realizado tan cuantioso esfuerzo, y que son los que deben impulsar la economía.

Bien es cierto que 2015 es el año que marcará el fin de la primera legislatura de Mariano Rajoy como Presidente del Gobierno, y como cualquier político que se precie, recurrirá a la herramienta de la demagogia para continuar en el cargo, por lo que dicha bajada de impuestos puede ser una arma en su campaña electoral o una simple coincidencia, pero este es un tema que dejaremos a los tertulianos de la radio o televisión para centrarnos en la idoneidad de la reforma, y de la realidad de que España pueda permitirse bajar impuestosbajada de impuestos

Como bien sabemos, la reforma fiscal reduce a cinco, los tramos del IRPF reduciendo los tipos de gravamen en cada uno de dichos tramos, pasando a un 47% en 2015 y un 45% en 2016 el tipo marginal máximo que actualmente se sitúa en un 54%.

Por otro lado, se aumentan los mínimos personales y familiares exentos tratando de adecuarse mejor a las circunstancias personales y familiares de los contribuyentes.

Por último en referencia a la repercusión en la imposición directa del sistema tributario, la reforma reduce el tipo de gravamen general en el impuesto sobre sociedades, de un 30% actual, a un 28% en 2015 y un 25% en 2016. En el caso de las pymes se introduce la posibilidad de aplicación de una reserva de nivelación y otra de capitalización que podrán reducir el tipo impositivo del 25% al 20%.

El efecto que debería tener esta reducción de los impuestos directos sería el siguiente:

  1. En primer lugar, con la reducción del IRPF, las familias tendrán mayor renta disponible.
  2. Sin tener en cuenta la propensión marginal al consumo, se supone que al no haber bajado el IVA, el consumo de las familias, que estarán dotadas de mayor capacidad económica, aumentará.
  3. Este consumo activará la economía en el sentido de que las empresas obtendrán más ingresos, y con la rebaja impositiva, quedarán gravados a un nivel inferior que permitirá obtener mayor liquidez y renta disponible.
  4. Debido a que las empresas tendrán mayores recursos, podrán fomentar la inversión, tanto a nivel empresarial y financiero, como a nivel laboral, aumentando y reforzando puestos de trabajo.
  5. Esta inversión, hará que se creen nuevas empresas, y nuevos puestos de trabajo por un lado, y por otro aumentará aún más, la renta disponible de las familias.
  6. Este hecho propiciará que la recaudación de la Administración Pública en lugar de reducirse, aumente vía impuestos indirectos por el consumo (IVA e impuestos especiales), y al haber más y mejores puestos de trabajo, también podría verse aumentada vía imposición directa.
  7. Aumentando la recaudación, se podrá hacer frente a la deuda pública (98,90% del PIB Español actualmente) que porcentualmente se verá reducida por el aumento del Producto Interior Bruto, creando una estructura sólida y solvente, que atraerá capitales que invertirán en el país fomentando la inversión que generará más empleo.
  8. Todo ello elevará aún más la recaudación, que se devolverá a los contribuyentes en forma de gasto público.
  9. Por la vertiente del ahorro, este queda gravado, por lo que también aumentara la recaudación, y por otro lado, los bancos podrán abrir el grifo, ya que tendrán más mayores recursos para invertir y prestar.

En definitiva vemos como una bajada de impuestos es la llave para la recuperación económica, pero este modelo de economía globalizado no cuenta con la subjetividad del ser humano, por lo que existen factores adversos que pueden viciar el flujo que acabamos de seguir. Es por ello que si nos saltamos algún escalón, se debe tener un colchón de apoyo y un plan de reacción ante lo que pueda surgir.

No obstante, y por todo lo que acabamos de ver, a la pregunta de si España puede permitirse bajar impuestos, podemos afirmar que sí, pero al igual que dijo el famoso economista Milton Friedman “estoy a favor de reducir impuestos bajo cualquier circunstancia y por cualquier excusa, por cualquier razón, en cualquier momento que sea posible”, yo también pienso que siempre es buen momento para bajar impuestos, y salir de una crisis y conseguir una recuperación económica es más que factible reduciendo la carga impositiva del contribuyente.

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